Antorcha no ve imposible que los pobres lleguen a gobernar

MORELIA, Mich., 20 de abril de 2011.- No es con un nuevo partido como las cosas van a cambiar en el país, el único camino para salir adelante “es que los pobres se unan y tomen el poder” afirmó Omar Carreón Abud, dirigente en Michoacán de Antorcha Campesina. Ante el próximo proceso electoral que ya se avecina, Carreón Abud destacó que en México y en el mundo lo que se requiere es que “la clase trabajadora sea la que ya nos gobierne”, pues no es imposible que los más desprotegidos sean quienes tomen las riendas del país y del estado, sobre todo si en el registro de la historia “los únicos presidentes de la República que nos han gobernado y nos han gobernado bien, han sido los de origen humilde como Don Benito Juárez y el general Lázaro Cárdenas del Río”. “Los dos mejores presidentes que ha tenido el país han sido el Benemérito Juárez, el más humilde de todos y el general Cárdenas, quien era un indio muy pobre de Jiquilpan”, abundó. Siendo así ¿Por qué no lo habríamos de intentar otra vez? Reiteró, sobre todo si es inminente la búsqueda de una patria mejor. Así que insistió en que los 37 años que tiene de fundada Antorcha Campesina, “sus integrantes no se han cansado de luchar y de estar organizados, y ahora menos en que nuestra labor será la de convencer al pueblo de que sí se puede llegar a gobernar”. De lo contrario, cada que se lleguen las contiendas electorales “los candidatos nos seguirán buscando para hablarnos bonito y para que votemos por ellos, y ya que estén en la silla nos desconocerán”. Si así seguimos, continuó, “seguirán sin resolver las demandas del necesitado, por ello es que el pueblo se debe unir y tomar en poder en este país, sobre todo si son ellos y la clase trabajadora los únicos generadores de la riqueza de México”. Afirmó que el pueblo michoacano ya está organizado y que van a trabajar por mejorar la situación, ante el fracaso que han tenido las élites de sacar del rezago al pobre, sobre todo ahora con tanta inseguridad, en que ya la gente necesitada no puede ni resolver su necesidad de empleo yéndose a los Estados Unidos a trabajar como inmigrantes.