Teléfono Rojo/José Ureña
El Congreso dejará vestidas y alborotadas a las Fuerzas Armadas
El azar de la política está lejos de las necesidades del país.
Lo comprobaremos en estos días.
A partir del duro y terminante discurso del general Salvador Cienfuegos, todo mundo se rasga las vestiduras y clama reformas a la Ley de Seguridad Interior para regular la participación de las Fuerzas Armadas.
Todos menos, léalo usted bien, quienes lucran con posiciones, prebendas y hasta recursos públicos al socaire de los derechos humanos y medidas justicieras para los desvalidos.
Son estas organizaciones no gubernamentales –muchos de ellos en realidad negocios privados o sectarios- las que han doblegado al Ejecutivo y al Legislativo.
Los postraron para exigir una discusión pública –democrática, como dice su retórica- antes de cualquier enmienda y más si se trata del Ejército y la Marina.
Aquí está el embrollo.
Lo coordinadores parlamentarios –el presidente Pablo Escudero, el priísta Emilio Gamboa, el panista Fernando Herrera y el perredista Miguel Barbosa- pueden hacer promesas, pero esa cosa etérea llamada sociedad civil lo impedirá.
NI DICTAMEN NI EXTRAORDINARIO.
Emilio Gamboa sugirió el domingo un período extraordinario para diciembre o enero.
El panista Roberto Gil Zuarth, presidente del Senado hasta agosto, hizo una propuesta urgente:
-Aprobemos las reformas antes de Navidad.
A juicio suyo están dadas las condiciones para dar ese gran paso y terminar con decenios de vacíos.
Porque, lo hemos dicho aquí cuando advertimos del cansancio castrense, las indefiniciones están desde mediados de los setenta con la llamada Operación Cóndor y se acentuó hace dos lustros, cuando Felipe Calderón sacó a las tropas a carreteras, puertos y ciudades.
Entonces se agudizó el acoso a las milicias y ése aumenta cada día.
Con esos antecedentes, le presento tres hipótesis:
Primera.- No se cumplirá el propósito de Gil Zuarth de tener dictamen antes de Navidad porque no hay consenso, o condiciones como se les llama a las excusas políticas y parlamentarias.
Segunda.- Pese a todo hay dictamen, pero deberá cumplirse la promesa de llevar el texto al análisis –y supervisión, qué caray- de las organizaciones opositoras a la participación de las Fuerzas Armadas en seguridad.
Y tercera.- como en ningún caso habrá dictamen –el proyecto final-, todo se va hasta el próximo período ordinario de sesiones de febrero.
O sea, mi general Salvador Cienfuegos y mi almirante Francisco Soberón, sigan con sus bilis y a merced de los demagogos.
ULISES RAMIREZ PIERDE ESPACIOS
En el estado de México la grilla se mueve por todos lados.
A través de una alianza con los alcaldes de Atizapán y Huixquilucan, Ana Balderas y Enrique Vargas, el panista Ulises Ramírez quiso ganar consejeros nacionales en la Asamblea Estatal.
Pero 15 de los 21 espacios fueron obtenidos por gente de Edgar Olvera con su operador Alfredo Oropeza y el primer lugar lo ocupara Liliana Carbajal.
O sea, quítele puntos a Ulises Ramírez para candidato en el estado de México.