Observador ciudadano/Enrique Bautista Villegas
NOCHE DE MUERTOS
Enrique Bautista Villegas
México y Michoacán paralizan sus actividades económicos la noche del primero de noviembre, Noche de Muertos, y el día siguiente, Día de Muertos. Durante ese breve pero intenso lapso de tiempo los mexicanos recordamos y celebramos a nuestros seres queridos que ya dejaron este mundo.
El origen de esta festividad entre los pueblos prehispánicos se remonta a tiempos inmemoriales, aunque la fecha y el periodo que ocupaba su celebración variaba. Con la llegada e los españoles y los tiempos de la conquista fue fusionada con la celebraciones europeas, y aprovechada para inducir la cristianización de los pueblos originales en lo que hoy es México.
La fiesta de Noche de Muertos se ha arraigado como una tradición muy mexicana. Su manifestación entre los pueblos indígenas y en particular entre el pueblo Purepecha es rica en cuanto a significado y simbolismos. Constituye una oportunidad de reflexión y espiritualidad para quienes la practican. Su colorido y originalidad la hantransformada en objeto de respeto y admiración, lo que ha hace que sea seguidacon interés en todo el mundo.
La fiesta de Noche de Muertos estimulanuestros valores y recupera nuestras raíces. Su práctica ha sido recogida con imaginación por la sociedad en muchas partes del país. Es aprovechada para materializar la creatividad del pueblo a través de la preparación de altares y ofrendas en lugares públicos,así comoen los hogares de cada vez mayor número de familias. En cada ocasión se organizan de manera espontanea puestas en escena del “Don Juan Tenorio”, tocadas de música, performances, desfiles de de zombies y catrinas y multiplicidad de nuevas manifestaciones creativas.
Su celebración constituye una oportunidad efímera para olvidar la gravedad de las circunstancias que afectan al país; para recordar a nuestros muertos, pero también para actuar solidariamente y abrir un espacio de espiritualidad, nostalgia y tranquilidad, que tanta falta nos hace.Debemos fortalecerla y celebrarla con orgullo.
Que la Noche de Muertossirva para unirnos, recuperar el rumbo al desarrollo y la equidad, el respeto y la solidaridad entre los mexicanos.