Lo bueno y malo del 2016/Eusebio Pacheco Castro
El fin de año no es muy distinto a los demás, aunque la causa de las preocupaciones es otra, la preocupación y la incertidumbre económica, social y política están presentes. De igual manera como ya es costumbre que se realice y que se critiquen a los diputados, hoy salieron de sesión alrededor de las 4 de la mañana, y lo que provoca más indignación y críticas es que lo publican como si fuera una muestra de preocupación y de trabajo arduo cuando la mayoría de ellos no pudo llegar a tiempo a muchas sesiones ordinarias durante el año mostrando así su desinterés, además que solo están haciendo su trabajo.
Varias cosas de que preocuparse y muchos posibles culpables, si la gasolina debe su valor a las malas políticas nacionales o la problemática internacional, si el valor del dólar será causa de la nueva presidencia estadounidense o de la mala política económica de México, algunas respuestas tal vez las obtendremos, así como lo menciono Fidel Castro, con el juicio del tiempo. Sin importar lo anterior los mexicanos celebraremos en familia y con amigos la llegada del nuevo año, lleno de buenos deseos, esperanzas y nuevos propósitos.
Como nos han enseñado, que nuestro destino “está en manos de dios” es momento de quitarle un poco de protagonismo y trabajar más por nosotros mismos y un paso importante será comenzar el año alimentando el alma a través de ayuda hacia la guerra que se está dando en países como Siria, que nos sintamos parte de la solución y no nos volvamos solo espectadores, recordando que nosotros a pesar de todo tenemos esperanzas de un mejor futuro, sin embargo, existen muchas personas que ya la perdieron, que existe una generación completa que no tendrán estudios y que está creciendo rodeado de violencia.
El consejo de Seguridad de la ONU ha sido superado y muchas veces ignorado, la ayuda humanitaria tampoco ha sido suficiente y parece que sobre todo países latinoamericanos han decidido mantenerse al margen de este conflicto, tal vez por la falta de comprensión de la guerra, así como por la intervención de EUA y Rusia, o tal vez simplemente porque sus ciudadanos no exigen una postura, no brindan apoyo y no muestran indignación por lo sucedido en esos países.
Genocidios han sido denunciados a través de videos que han sido publicados, existen miles de personas atrapadas en ciudades como Alepo, otras que se encuentran acampando en medio de la nada, y la ayuda humanitaria que no es suficiente.
Hagamos un llamado a nuestro gobierno, brindemos apoyo económico a las diferentes organizaciones, y tratemos de entender que el mundo está pasando por una guerra de la cual no podemos simplemente voltear hacia nuestro continente.
Ese primer acto de solidaridad y humanismo podría ser la mejor manera de iniciar el 2017.
Feliz año 2017 a todo el mundo.