Libre expresión/Carlos Alberto Monge Montaño
Auditoría al IEM…
“Para investigar la verdad, es preciso dudar, en cuanto sea posible, de todas las cosas”… René Descartes. (1596 – 1650). Filósofo y matemático francés.
Gracias a la denuncia que presentó ante la Auditoría Superior de Michoacán un ciudadano molesto con la autoliquidación que se otorgaron 3 consejeros del Instituto Electoral de Michoacán (IEM) en el 2014 y los apoyos económicos que se han entregado a los representantes partidistas desde el año pasado, finalmente el auditor, José Luis López Salgado, se pronunció al respecto y comprometió ampliar la revisión que se realiza a dicha institución.
Las dudas sobre presuntos malos manejos de los recursos públicos en el IEM, surgieron tras el reportaje que realizó el periodista Andrés Resillas Mejía y que publicó en su Revista Búsqueda, el pasado agosto.
En dicha investigación, Resillas Mejía documenta además, que prácticamente todas las compras que realizaron para el desarrollo de los comicios estatales del año pasado, se hicieron sin licitación; contrario a lo estipulado en los marcos jurídicos, es decir, optaron por hacer de la excepción la regla, dando el mismo tratamiento a la compra de vehículos.
Pese a los argumentos que sobre todos los temas ha expuesto el presidente del Instituto Electoral, Ramón Hernández Reyes, el auditor superior de Michoacán está obligado a ampliar su investigación, también al terreno de las licitaciones y los bonos que se auto otorgaron los consejeros electorales.
Por el momento, José Luis López Salgado informó que ningún organismo puede apelar a su autonomía u otro factor para realizar una autoliquidación, ni tampoco contempla el otorgamiento de recursos mensuales a los representantes partidistas. Adelantó que en caso de resultar culpables, los consejeros tendrían que reintegrar el monto que presuntamente dispusieron de manera ilegal y podrían ser inhabilitados. Al respecto, Hernández Reyes dijo que contestará a los señalamientos del auditor, sólo en el ámbito legal.
Vale recordar que en el 2015, el Instituto Electoral de Michoacán dispuso de un presupuesto superior a los 530 millones de pesos; que no licitó las adquisiciones como lo marca la ley, sino que benefició con la adjudicación directa a empresas como: Podernet, Seriplast de México y Litho Formas, entre otras y que el IEM informó que todos sus integrantes estuvieron de acuerdo en evitar la licitación pública y hacer la adjudicación directa.
Tampoco se licitó la compra de 17 automóviles y 1 motocicleta, pese a que la ley lo obliga cuando se adquieren más de 6 unidades. Para evitar la licitación, pareciera que el IEM optó por comprarlos en cantidades menores.
El reportaje de Andrés Resillas también documenta que las liquidaciones de los consejeros ascienden a 491 mil 593 pesos, la del presidente a unos 712 mil; que se pagaron más de 19 millones por concepto de “Horas Extraordinarias” y que por “Compensaciones Eventuales” el gasto superó los 47 millones de pesos.
Ante la desafortunada debilidad de las instituciones públicas del país y en especial las de Michoacán, urge que la Auditoría Superior entregue cuentas a los ciudadanos en cuanto a transparencia y rendición de cuentas por el manejo de recursos públicos; más aún, cuando se trata de instituciones presuntamente conformadas de manera ciudadana.
La sospecha advierte que en Michoacán, prácticamente todos los “organismos ciudadanos” se han conformado preponderantemente en un reparto del pastel entre los partidos políticos representados en el Congreso estatal. Por ello es que urge clarificar el caso el IEM, por citar un ejemplo, para empezar a recuperar algo de la credibilidad de los michoacanos. Ojalá no nos queden a deber otra vez, el Congreso estatal y su Auditoría Superior.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.