Santiago y el Rufo
En el mitin final de la marcha de la paz, el poeta Javier Sicilia demandó: “¡Pido la renuncia del secretario de Seguridad Pública!”… Lo comparto.S- Como comparto su petición de renuncia al gobernador panista de Morelos, el inepto, cuando no corrupto, de Marco Antonio Adame.R- Auuu, mi Santias, si sigues la línea de Javier Sicilia de pedir renuncias, nos vamos a quedar solos.S- Mi Rufo: Necesitamos renacer, necesitamos reinventarnos en una sociedad humanista y nacionalista que privilegie a las personas sobre la riqueza y la ganancia y que tenga como objetivo ¡México! Como necesitamos hacer efectiva la demanda de Alejandro Martí: ¡El que no pueda, que renuncie!... Ya basta de vividores del presupuesto que ocupan puestos para los que no tienen capacidad. Ya basta de pagar favores y militancia otorgando puestos públicos a compadres, amigos y correligionarios que no tienen capacidad, y muchas veces no tienen ni la voluntad, ni la honestidad requeridas.R- Guauuu, visto así no puedo más que coincidir también con Sicilia y apoyar su demanda para que renuncien los inservibles, mi Santias y si es necesario, hacer propio el reclamo argentino: ¡Que se vayan todos!S- Lo que no creo que sea necesario si escuchamos el llamado de esperanza del poeta, en el Zócalo, lo cito: “Hemos llegado a pie, como lo hicieron los antiguos mexicanos, hasta este sitio en donde ellos por vez primera contemplaron el lago, el águila, la serpiente, el nopal y la piedra. Hemos llegado en silencio, porque nuestro dolor y horror son tan inmensos, que ya no hay palabras para describirlos. Estamos aquí porque aún creemos que es posible que la nación vuelva a renacer y a salir de sus ruinas, para mostrarles a los señores de la muerte que estamos de pie y que no dejaremos de defender la vida de todos los hijos y las hijas de este país, que aún creemos que es posible rescatar y reconstruir el tejido social de nuestros pueblos, barrios y ciudades”.R- Grrr, de acuerdo, pero sin quitar el dedo del renglón, mi Santias, recordemos lo expresado por Fernando Savater: “La impunidad pudre más a México que la inseguridad”.S- Simón, mi Rufo, pero sin perder el rumbo, como lo ha perdido el gobierno, cito a Raymundo Rivapalacio: “La estrategia que se pide ahora existe desde el 8 de marzo de 2007 y se llama Estrategia Integral de Prevención del Delito y Combate a la Delincuencia. Fue un fracaso, pues ni la Secretaría de Educación promovió la cultura de legalidad, ni construyó espacios seguros y libres de violencia en las escuelas; ni la de Desarrollo Social incorporó los componentes de apoyo social para evitar que la pobreza fuera el combustible para el reclutamiento de sicarios entre los jóvenes, ni creó espacios alternativos de esparcimiento para la población que está en busca de identidad; ni tampoco Hacienda hizo nada por romper los circuitos financieros criminales, hasta muy recientemente.” Y en forma tibia, añadiría yo.R- Auuu, eso de tener objetivos claros y dejar el paso a la razón, sin perder la emoción es el reto, no perdamos de vista las reflexiones que nos hace José Sosa en La Crónica: “Lo que terminaría minando las bases sociales del terrorismo en España fue un compromiso ciudadano e institucional, claro y sin cortapisas. Fue la valentía de la sociedad a la hora de denunciar y de señalar los arreglos que sustentaban el terror como forma de actuación política. En contraparte, las instituciones públicas atendieron y atajaron a los actores violentos; asegurando también la protección de quienes desde los pueblos, las escuelas y las calles los denunciaron. Se dio, pues, una clara alianza entre población y autoridades, sin que ello implicara la confusión de papeles o el abandono de los principios democráticos.”S- ¿Trabajar en alianza con autoridades, mi Rufo?, ¿no suena a ingenuidad?R- Guauuu, quizás, aunque quiero creer que todavía existen en la política hombres de bien que necesitamos detectar y apoyar para hacer la tarea juntos, sin pecar de ingenuos. Cito lo escrito por Gregorio Ortega: “Nadie, en su sano juicio, solicitaría entregar la plaza a la delincuencia organizada, pero también nadie, con dos dedos de frente, puede desconocer que esas “gavillas”, como ahora las adjetiva Felipe Calderón, para operar requieren de cómplices en todos los niveles de gobierno, necesitan armas, dinero e impunidad para moverse, facilidades y recursos que únicamente pueden obtener a través de quienes administran la agenda de los poderes fácticos y del Estado.” De que las cosas están podridas, lo están, pero de que debemos encontrar la manera de trabajar junto a nuestras autoridades, es un hecho y una necesidad… Lo que no limita ni evita que nos quitemos de encima lacras, como en mi opinión son, Genaro García Luna y el ínclito (des)gobernador de Morelos, entre otros. ¿Estás escuchando, Felipe?Un saludo una reflexiónSantiago Heyser BeltránEscritor y soñador