Hablando en serio ?Un Secretario de Vergüenza?
Escribe José Cárdenas: “Diálogo en Los Pinos: “- ¡Eres un idiota!, ¡te dije que sacarás el ron… no al Rhon!”Volvamos al tema de hoy: “Un Secretario de Vergüenza”... ¡No!, claro que no, te falló estimado lector, cuando me refiero a un Secretario de vergüenza, no me refiero a Genaro García Luna,… un fracaso como responsable de la seguridad, pero eso sí, un éxito como publicista y novelista…Tampoco me refiero al idiota que se anuncia diciendo: El tamaño cuenta… Ese no es de vergüenza, ese esta tonto ¿Acaso no ha visto este ínclito Secretario el tamaño de su jefe?... Para eso de escupir para arriba, algunos miembros del gabinete Montessori se pintan solos.Y no, no me refiero al Secretario “gris” y paisano michoacano, que permite y/o solapa las “inversiones” que destruyen los manglares en el Caribe o se espera a que los gringos y canadienses nos den la mano para apagar incendios forestales en estados gobernados por la oposición.No habló tampoco del “porro” que, desde la Secretaría del Trabajo, expresa que la generación de empleo no es lo suyo, que eso le corresponde a la Secretaría de Economía, donde tampoco dan una y sigue buscando “loas” internacionales firmando tratados comerciales en contra del decir y de los intereses del sector empresarial mexicano, al que solo le alcanza para mentarle la madre; en tanto seguimos dependientes de que a los gringos no se los lleve el tren para mantener sana nuestra economía, peligrosamente colgada de alfileres y de decisiones que se toman “fuera” de México.¡No!, la señalada no es la secretaria de turismo, que cuando no recibe un fregadazo del Presidente de algunos mexicanos, declarando que los seleccionados son inocentes, que la culpa es de un México que alimenta a sus vacas con Clembuterol, lo que espanta al turismo que ya ni de los famosos tacos mexicanos quiere saber nada; lo recibe del Secretario de Salud, hoy precandidato a gobernador de Guanajuato, el que, publicitó “su lucha” en contra de una influenza “mortal”… ¡Sí!, mortal de necesidad, ya que acabó a restauranteros, enfermó la economía nacional y dio golpe mortal al turismo extranjero; todo ello sin contar el daño que infringió al negocio del futbol, el que tuvo que jugar con estadios vacíos para dar testimonio internacional de los cuidados sanitarios del “Secretario”, ante la incapacidad de contar con laboratorios de primer mundo en México (recordemos que los excedentes petroleros se pierden, en mi opinión, en programas electorales y electoreros, en los bolsillos de algunos funcionarios y en “Centros” de capacitación en Guanajuato), por culpa de gobiernos y gobernantes que pagan favores a medios de comunicación y empresas televisoras, gastando en exceso el dinero público, para cacarear “inventados” logros gubernamentales,… dinero que tendría mejor fin si lo invirtiéramos en sistemas de salud de vanguardia, investigación en serio y laboratorios de primer mundo, ¿verdad Sr. Córdova?Una vez más fallaste, estimado lector, como secretario de vergüenza, no me estoy refiriendo a quien encabeza nuestra Marina, quién obtiene “aplausos” de los gringos, a pesar de los daños colaterales (léase inocentes mexicanos muertos), asesinando y exhibiendo capos en Cuernavaca, ciudad, que por cierto, está más lejos del mar que México de diosito.Tampoco me refiero a la secretaria de relaciones exteriores, ni al secretario de desarrollo social (ambos con minúsculas), porque la verdad, no sé ni quiénes son, ni que hacen.Del de agricultura y ganadería, nada más con ver la dependencia alimentaria, la migración y las vacas engordadas con Clembuterol, me pongo a llorar, pero no es el de vergüenza…¡No!, tampoco me refiero a la joven “promesa” política que desde Baja California se trajo el Presidente, para manejar la política interior de la República. Puesto que nos podríamos ahorrar los mexicanos, al constatar que, dados los intereses electorales del “macizo”, la política interior no es tema y tampoco prioridad de este gobierno.Lo sabía, estimado conciudadano, pensaste que como secretario de vergüenza me iba a referir al caprino y recientemente destapado Sr. Borrego (pues dice puras borregadas) ¡Pues no! ¡Fallaste corazón!, diría José Alfredo Jiménez, no me refiero al responsable de que nuestras fronteras sean una coladera por las que de aquí para allá pasan droga a lo pendejo y de allá para acá pasan armas para los malosos que asesinan mexicanos y migrantes.¿Te rindes?, amigo lector ¡Bien!, te diré que desde mi punto de vista, quien se lleva el título del Secretario de Vergüenza es el General Guillermo Galván Galván, responsable, en mi opinión, por servil y falto de carácter, de que hoy el Ejército Mexicano esté en la picota por actuar en la ilegalidad, por asesinar civiles, por irrumpir, contraviniendo el mandato constitucional, en domicilios de mexicanos y por lo más simple pero no menos denigrante ¡Por mentir!... ¡Así de sencillo!Un saludo, una reflexiónSantiago Heyser BeltránEscritor y soñador