De todos depende preservar legado de Vasco de Quiroga
URUAPAN, Mich., 14 de marzo de 2011.-De todos depende que se siga preservando el legado de trabajo de arte popular, que dejara Vasco de Quiroga al pueblo Purépecha. Fue un hombre visionario que murió a los 95 años de edad en la Huatepera de Uruapan, el 14 de marzo de 1565.Lo anterior fue resaltado por el profesor Rogelio Servín Galván, quien fe el encargado de emitir la reseña histórica, con motivo del CDXLVI aniversario del fallecimiento de “Tata Vasco”.Ante el Ayuntamiento de Uruapan encabezado por el presidente Antonio González Rodríguez, autoridades de la zona escolar 044, directivos, alumnos, padres de familia y profesores de la primaria “Vasco de Quiroga”, el orador señaló que a través de la herencia de oficios, el originario de Madrigal de las Altas Torres, España, impulsó el desarrollo económico y ayudó al fortalecimiento de la cultura e identidad de las comunidades indígenas, a quienes también protegió de la opresión que ejercía sobre de ellos la Corona y el gobierno de la Nueva España.La enseñanza que legó el ilustre personaje sigue vigente en los pueblos Purépechas y manifestó que de todos depende que se siga preservando.Relató que desde su llegada a estas tierras en 1533, “Tata Vasco” empezó a dejar su huella que aún persiste en las comunidades indígenas, estableciendo una serie de hospitales, siendo el primero el de Santa Fe de la Laguna y otro el de la Huatapera de Uruapan, lugar que ahora es el museo de los Cuatro Pueblos Indígenas de Michoacán, en donde se realizó este evento luctuoso.También creó el Colegio de San Nicolás, la cual fue una de sus obras más importantes. En 1538 se ordenó sacerdote y en la misma ceremonia fue nombrado Obispo.Tras la reseña, autoridades municipales y educativas montaron guardia de honor, colocaron ofrenda floral y todos los presentes guardaron un minuto de silencio frente a la imagen de “Tata Vasco” y posteriormente, alumnos de primer grado turno matutino de la primaria estatal “Vasco de Quiroga”, representaron con gran colorido de atuendos, los oficios legados.A Tingambato le inculcó el oficio de la elaboración de pan, a Uruapan la artesanía de las bateas y jícaras, a Jaracuaro la fabricación de petates, a Paracho la de violas y violines, a Patamban las ollas de barro, a Santa Clara el cobre, entre otros más que fueron bellamente representados por los pequeños.En este marco, el Presidente Antonio González entregó un reconocimiento al supervisor Pánfilo Huerta Capiz, con motivo del 50 aniversario de la zona escolar No. 044 de educación primaria.