Louis y el fin de su propio mundo
MORELIA, Mich., 15 de diciembre de 2016.- Louis, un hombre en sus treinta, viaja de regreso al seno familiar después de 12 años de ausencia. Además de su equipaje, carga con una serie de recuerdos y vivencias, y una urgencia que le carcome.
Va a encontrarse con Martine, su madre; con Suzanne, su hermana menor que poco conoce; con Antoine, su hermano mayor, y con la esposa de éste, Catherine. Cada uno con características muy marcadas, producto de sus propias circunstancias.
Los recuerdos, las nostalgias que iluminan el camino de regreso, y al mismo tiempo lo oscurecen, la esperanza desvencijada como la vieja puerta de la casa de la infancia que aún permanece firme, esperan por Louis.
La música y sus domingos de familia, aunque sean disfuncionales, el costumbrismo rancio, los resentimientos como sarro en las venas familiares, los objetos como remoras del pasado, el miedo a la intimidad, las despedidas lentas, matizadas de sentimientos, son algunos elementos que encontrará el espectador a lo largo de los más de 90 minutos que dura este filme.
'No es más que el fin del mundo' está filmada en primeros y primerísimos planos, con ambientes íntimos, a veces carentes de luz, pero no del todo oscurecidos. Cuenta con la participación de Gaspard Ulliel (Louis), Nathalie Baye (Martine), Vincent Cassel (Antoine), Marion Cotillard (Catherine) y Léa Seydoux (Suzanne).
Distribuida en México por ND Mantarraya, la película del director canadiense Xavier Dolan, cuyo título original es Juste la fin du monde, se estrenará el 25 de diciembre en las salas comerciales de México.