Tirando a dar/Juan José Tapia Bastién

Para Gonzalo Reyes AgustínNo le quedó otra: las pretensiones del edil de Huixquilucan, Alfredo del Mazo, se tendrán que esperar un sexenio más para contender por el gobierno del Estado de México, porque la lógica del ganador se impuso por sobre la del obsesionado: Eruviel Ávila será el candidato del PRI en esa entidad por ser el que tiene más afinidades entre los que deciden lo que hará el partido, pero también entre los votantes. El gobernador Peña Nieto no quiere poner en riesgo las cosas más de lo necesario y se abstuvo de imponer lo que podría resultarle contraproducente. Además, del Mazo tiene tiempo para esperar otra oportunidad ahora se trata de asegurar el triunfo.No es que sea deseable el regreso del PRI al gobierno federal ni que continúe en el poder en el vecino estado de México, sucede que están jugando a ganar y eso se nota.Los priístas no han aprendido nada estando fuera del poder federal: ni se han sacudido las viejísimas prácticas del dedazo, ni les da vergüenza hacer tratos con caciques para ganar a costa de lo que sea. Precisamente en la elección que más interesa en este año, Elba Esther Gordillo será aliada del PRI para buscar la permanencia en el poder a pesar de las múltiples denuncias por corrupción y otras lindezas que la explotadora lideresa tiene sobre sí. Otro aliado del PRI, el Partido Verde, tampoco cuenta con las mejores cartas de recomendación como para ser un aliado preciado pero algo aportará a la causa tricolor y con eso, PVEM y PANAL, se estarán asegurando algún puesto en la administración estatal y luego en la federal si es que el actual gobernante mexiquense llega a derrotar a los adversarios que postulen PAN y PRD. Para los tres partidos lo que importa es ganar y no las ideologías.Los que no saben cómo desenredar la madeja son los del Sol Azteca y los albiazules: en el PRD las cosas se pondrán calientes como su Sol luego de lo que ocurra en la definición o no de la alianza con los panistas: el candidato de Andrés López es Alejandro Encinas y este no quiere nada con Acción Nacional. Es decir, ni aunque le propongan encabezar la alianza –la cual ya casi es un hecho-se alinearán todos los actores para desarrollar una contienda que les permita enfrentar con posibilidades de triunfo a lo que sí están haciendo los priístas: la unidad en torno a un solo proyecto y una sola persona.Los perredistas y los panistas no encontraron –aunque no todos- una mejor manera de afrontar la marea que produjo casi desde el principio de su mandato Enrique Peña, que no fuera la de aliarse: el pragmatismo puro con que explicaron su alianza al sólo quererla para sacar al PRI de los gobiernos estatales donde aún gobernaba y querer hacer lo mismo en donde todavía gobierna, han dejado confundidos a una buena parte de los votantes de ambos institutos porque no saben a qué se debe el matrimonio electoral que no concuerda con la adversidad en casi todos los demás temas como el de legislar para las mayorías y el de gobernar con sentido social y no macroeconómico, como lo han hecho los últimos cinco presidentes incluyendo al actual.Es casi evidente que la instrucción aliancista salió de la oficina del Presidente Felipe Calderón y es entendible para que la acaten los panistas pero, ¿por qué lo habrían de hacer los del PRD? Menos nos podrán explicar cómo es que se han entrelazado con los mismos que ahora, con una iniciativa reciclada, se juntarán con los diputados federales priístas para imponer una reforma laboral que va contra los trabajadores y que favorece a los patrones en un proceso que intentaron como albazo pero que mejor decidieron hacerlo sin esfuerzos y cínicamente en alguna sesión normal de la Cámara de diputados antes de que concluya el periodo ordinario de sesiones.Veremos a los panistas festejar en dos banquetes: uno cuando se agarren de las manos con los perredistas al consolidar la alianza electoral para el estado de México y, otro, luego de aprobar la reforma laboral con sus cuates del PRI. Si las cosas salen así, ¿en dónde está el beneficio para la población que cree en la emancipación que provendrá de los hombres y mujeres que están en el PRD?