¡Agárrenlo que se nos pela!
Cosas de números, de estadísticas, de cifras que con su frialdad, hielan, congelan, hacen trizas intelectos y cualquier sentido de mesura.Al cierre de esta edición, el candidato del Partido Revolucionario Institucional a la Presidencia de la República, Enrique -no “Ernesto” como algunos despistados lo han rebautizado con malicia o dolo perceptible- mantiene una diferencia promedio de entre 20 y 25 puntos de ventaja sobre su más cercano perseguidor.Y no, miren qué curioso, no se trata ya sólo de la panista Josefina Vázquez Mota, sino ahora también el abanderado de la izquierda Andrés Manuel López Obrador, quienes se disputan de manera muy cerrada esa segunda posición… aunque cada vez más lejana del puntero.Lo preocupante para el blanquiazul y su comandante “supremo” es que la “Jefa” pese a todo el aparato de estado que le acompaña, parece no dar para más.Por esos guarismos que parecen ya definitorios, catastróficos para los adversarios de Peña Nieto, es que se ha recrudecido la guerra sucia, y por toda estrategia, se concretan a lanzar toneladas de lodo al ventilador, sin reparar que ese método no ha funcionado –no al menos hasta el momento- y lejos de restar simpatías al mexiquense, lo siguen fortaleciendo.Un día sí, y otro también, los ataques hacia la figura de Peña Nieto parece ser el único objetivo del discurso central que utilizan en sus respectivas giras proselitistas tanto Vázquez Mota como López Obrador.Incluso éste último pareciera resuelto ya ha dejar tras de sí el disfraz de oveja y asomar las fauces depredadoras que le sientan tan bien como el regalo de Reyes a los niños, pues ahora vuelve al discurso incendiario, retrae la mano franca que antes había extendido y se lanza con todo sobre el mexiquense, a quien insistimos, no le han podido hacer mayor mella y de eso dan cuenta TODAS las mediciones a la fecha realizadas.Y un día sí, y otro también, las encuestas se mantienen con pequeñas variantes, pero siempre contundentes en la preferencia en favor de Peña Nieto lo que parecieran no tomar en cuenta quienes diseñan las estrategias en los respectivos “war room’s” de derecha e izquierda, perdiendo con ello un tiempo valioso que difícilmente podrán recuperar.En tanto el priísta mantiene su recorrido por el país, con la firme determinación de hacer compromisos públicos y la promesa de que los cumplirá, como afirma, ya aconteció en el Estado de México.Cosas de la cruel paradoja, cuando hace poco mas de seis años López Obrador se jactaba, regodeaba, presumía, hacía alarde, de que “a este gallo ni una pluma le han quitado”, luego de salir fortalecida, victimizado, del pretendido “desafuero” que sólo lo relanzara hacia los primeros sitios de populismo. Y cosas del brutal contrasentido que hoy permea en las campañas de derecha e izquierda que como último recurso pretendan que sea a través del “debate” a celebrarse el próximo 6 de mayo cuando en predecible táctica de guerra, se le dejarán ir a la yugular a Peña Nieto y con ello derrumbar el cerco que representa –en estos momentos y de acuerdo a las mediciones últimas- algo así como 10 millones de votos que son los que aventaja el priísta a cualquiera de los dos que se quede con la segunda posición. Recordemos que precisamente López Obrador fue el más reacio a debatir entonces con Felipe Calderón Hinojosa y Roberto Madrazo Pintado, administrando como estaba los “10 puntos de ventaja” que siempre alardeó le concedían las encuestas que tenía en su poder. Por eso suena ridículo, por decir lo menos que sea ahora el forjador de esa ilusión que llaman “república amorosa”, quien más insista ahora que se debata en escuelas, empresas, medios de comunicación y todo sitios posible, en vez de hacer campaña, seguro como se siente que agrediendo a Peña Nieto podrá obtener esos 10 millones de votos que se necesitan para empatar y por lo menos dos millones más, a efecto de que no se “llamen” víctimas de un fraude electoral. En pocas palabras en este momento Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador o viceversa, necesitan 12 millones de voluntades ciudadanas que en un plazo de dos meses se “convenzan” del error en que persisten por apoyar o preferir a Enrique Peña Nieto y entonces, poder aspirar con bases, fundamentos no espejismos mediáticos, a ganar los comicios de julio próximo. Y algo digno de analizar para próximas entregas será sin duda por qué los mexicanos -muchos de ellos que hace 12 años dieron su apoyo a la transición pacífica representada por el vaquero Vicente Fox Quesada- hoy se muestran resueltos a no dar más saltos al vacío y prefieren que “regrese” el PRI y su candidato Peña Nieto haciendo válido el refrán que reza aquello de “más vale malo por conocido que bueno por conocer”. Por lo pronto alguien debe entrar en razón en los bandos opositores al PRI porque parecieran no darse cuenta que el plazo se acorta y cuando quieran ya no podrán, por más que griten: “¡agárrenlo que se nos pela!”. ¿Será?…CLARIDAD, NO ESTRIDENCIAEs público y por demás notorio que cada que hay un indicio o declaración de nuevos lamentables hallazgos de más adeudos, de inmediato surgen voces en busca de distraer la atención y con ello intentar que el efecto mediático aminore.Así podemos ver que apenas señaló el gobernador Fausto Vallejo Figueroa que aparecieron otros 15 millones de pesos -ahora de la Secretaría de Cultura- que se deben agregar a los más de 38 mil millones de pesos que según sus propias estimaciones, llevan detectados y ¡zaz!… que se le van a la yugular los diputados del PRD pidiendo por lo menos que le hagan juicio político al mandatario estatal.Pero no sólo los perredistas andan juegan su propio juego de distractores.También los panistas le entran a la danza con todo y sonaja, quienes sin más ni más, fueron y se apostaron ante el Instituto Federal Electoral, para denunciar no sólo al gobierno del Estado, sino al municipal –si es que en Morelia se puede considerar que tengamos gobierno con los dislates que comete diariamente el empresario concejal Manuel Nocetti- y exige sanciones severas.Así por un lado los del PRD invocan que es anti constitucional se encargue la auditoria de cuentas públicas a un cuerpo de ciudadanos, en tanto que los del PAN se dicen afectados por la similitud entre el lema partidista de la coalición PRI-PVEM, “Compromiso por México”, con el slogan de la administración estatal, “Michoacán, compromiso de todos”.Y por eso solicitan medidas cautelares para el retiro temporal de dicho slogan.Mientras tanto Michoacán se debate entre la parálisis, confusión y campañas de poca propuesta y en cambio, mucho lodo y descalificaciones. El falso debate al que han llevado los diputados locales del PRD –de la mano de Fidel Calderón Torreblanca quien dicho sea de paso le está ganando la partida de todas, todas a sus “pares” del PAN y del PRI- para alegar la improcedencia del consejo ciudadano y su presunta intromisión en tareas de fiscalización de recursos inherentes sólo al Poder Legislativo, ha ganado más espacio del que merece. La tarea, sin duda, compete a la Auditoria Superior de Michoacán, pero en las condiciones que se encuentra difícilmente podrán hacerla al menos en los próximos 4 años. De ahí que urja la contratación de auditores externos –previa consulta al Legislativo- por parte del Ejecutivo y que los ciudadanos invitados constaten que esta labor se realiza “sin tintes partidistas, sin sesgos, ni linchamiento alguno de por medio”, para que de una vez por todas se acabe la estridencia y se imponga la claridad, la transparencia. Los habitantes de esta entidad, por salud política -si se vale la expresión- demandan que se diga la verdad y dejen atrás las especulaciones, las diatribas, las acusaciones de unos y otros.Por un lado esto obliga al Ejecutivo del estado actuar con responsabilidad y sentido estricto de la legalidad, porque en definitiva no puede cargar con “culpas ajenas”.Pero también es obligado que quienes ya no están operen lo que deban operar en su defensa y con elementos probatorios, con “papeles en mano” demuestren que en efecto lo que se les imputa no corresponde a la realidad.Como nunca antes, la transparencia en la rendición de cuentas, debe ser algo más que líneas discursivas en la retórica oficial.La danza de los millones debe aclararse y no caer en un vodevil político de baja estofa.Los ciudadanos exigimos saber la verdad sin maquillajes, pero también sin abultamientos.Menos show mediático y mayor efectividad, eficacia. Sólo eso…¿Será esto mucho pedir?Vale…